Esta mañana, la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, en compañía del general director de Carabineros, Bruno Villalobos, y de los subsecretarios del Interior, Mahmud Aleuy, y de Prevención del Delito, Antonio Frey, participó de la puesta en marcha del Modelo de Integración entre Carabineros y la Comunidad (MICC), además de la visitar sus oficinas de operaciones. Esta metodología de trabajo comunitario, intenta optimizar la respuesta anticipada de Carabineros de Chile y se enmarca en el mejoramiento del Plan Cuadrante de Seguridad Preventiva.

Después de visitar la oficina de monitores georeferenciales y la de trabajo comunitario en la Prefectura Santiago Norte, la máxima autoridad del país se dirigió a Avenida José María Caro, en la comuna de Conchalí, para ver las nuevas luminarias que son fruto del trabajo entre carabineros y los vecinos. También recorrió la plaza Alegría en Acción del barrio El Cortijo, ubicada en la misma comuna.

“Para hacernos cargo de los problemas de seguridad ciudadana, no hay camino corto, no hay una fórmula mágica, no hay una bala de plata, que resuelva todo. Y lo único que tenemos que hacer, es hacer frente a la delincuencia que tanto daño causa a las familias chilenas a través de la unidad, del trabajo conjunto. El camino correcto es sumar la fuerza de Carabineros, de la comunidad y del Gobierno”, dijo la jefa de Estado, al comienzo de su intervención.

Luego, la Mandataria se refirió a los trabajos que son parte de la puesta en marcha del MICC en Conchalí: “Aquí están los resultados. Este lugar ha sido recuperado por los vecinos; dejó de ser un sector entregado al temor y al delito. Y se ha transformado en lo que tienen que ser las plazas en todo el país: un lugar para estar tranquilo, para pasarlo bien. En el trayecto hacia acá, también pude ver las nuevas luminarias que van a dar más tranquilidad a cerca de 5 mil vecinos, que todos los días pasan por este sector de Avenida Cardenal Caro para dirigirse a sus trabajos, a sus escuelas o a comprar, o a lo que vayan a hacer”.

El propósito fundamental del MICC es lograr que la gente se haga parte de las soluciones. De esta manera, se piensa a la comunidad como un conjunto de actores provistos de iniciativa y responsabilidad para conseguir resoluciones sustentables en el tiempo a las problemáticas de seguridad que actualmente los aquejan porque “nadie mejor que ustedes, saben lo que hay que hacer aquí, lo que se necesita en las calles, en los pasajes, en las plazas, en los paraderos. Esa es exactamente la idea detrás de este programa que hoy día estamos poniendo en marcha para que se consolide a nivel nacional, y que va a significar más de 4 mil 735 millones de pesos de inversión”.